Mythopoetics

The construction of our myths, whether traditional or modern (scientific), did not follow a cosmic plan of progressive unfoldment. They are not, as Schelling thought, tautegoric expressions of an extra-human force wrapped around itself which becomes self-evident and acting in the course of time, knowing itself in the process, expressing itself through the physical means available and formed at that particular time. They are neither, as less pantheistically inclined minds thought, metaphors of an analogous extra-human reality, shadows of a true essence which convey reflected meanings which our petty minds can hardly understand, though we benefit from their eternal radiance in the filtered versions given to us by officials and priests. In order to have a metaphor, we need something which is not a metaphor to relate it to, a referent whose ontic nature is independent. Even if there was such a thing we could never tell, for its independence would make it independent from us, and therefor...

   Dejando que la pena hablara, dijo Vicente Aleixandre que amar era olvidar la vida. Mas ¿cómo olvidar lo que somos, y abandonar lo querido en las frías manos de la nada? Los años, que acumulan infortunios, torpezas y malevolencias en forma de hábitos e inercias de llantos, las heridas, que nos empujan a no recordar el dolor para poder seguir amando con aquella niñez del mar -o a apenas respirar-, oprimen con daños, exiliando el corazón cansado, extrañado de sí, acorralado entre fantásmicas fronteras donde sólo las lágrimas de opio son la ideal compaña y el consuelo.   ¡Qué famélico el amor que olvida muerte o vida en su delirio! Se ha de querer morir como se ha de querer vivir, siempre por amor a la vida. En un ya sin dioses universo, ningún sentido es mayor que hacer poema de los ojos compañeros, de los asombrados espejos solares por donde riela la voz y la vaga memoria de otras vidas.   Amar es creer que a la vida aún le queda otra canción por cantar, sea...